Esta imagen inédita, la publico en honor a mi viejito Juan Ubaldo Soria Alarcón (camarada Cantuarias) estrechando la mano al camarada Chicho (el gran Salvador Allende – presidente de Chile).
Mi viejito fue extremadamente reservado, nunca me mostró esta foto; no obstante, recuerdo claramente, hablando de literatura, de los “Veinte poemas de amor y una canción desesperada”, que en Chile había conocido a su autor, el nobel Pablo Neruda. Yo, como chibolo preguntón y con alma de periodista —le hurgaba con preguntas— hasta que me contó que también conoció a Salvador Allende. No recuerdo bien las circunstancias.
Hay un vate que vive dentro de mí y me hace aflorar palabras y añoranzas, por tal motivo y por mi edad, esa conversación con mi viejito se centró más en Neruda y la impresión que le causó al camarada Cantuarias. No obstante, al encontrar -hace poco- la fotografía, me doy cuenta que hoy más que nunca se hace primordial poner en valor nuestra hermandad política sudamericana. Perú está entrando y peleando para no caer en una dictadura con pronóstico de horror. Sudamérica tiene todo para vivir bien y tranquilos, solo debemos romper nuestras cadenas.
Cantuarias y Chicho, estaban hermanados por la medicina, ambos médicos; también por la ideología, los dos querían el cambio radical de nuestros pueblos hermanos. Por ahora no contaré el pensamiento de mi gran viejito, sobre su opinión y crítica a ambos procesos revolucionarios, tanto en Chile como en Perú; con más investigación y pruebas lo contaré.
La imagen, calculo debe ser alrededor de 1965, con mi viejito de unos 35 años (Secretario de Organización de Bandera Roja) y camarada Chicho de unos 57 años (Senador de Chile).
Con esta imagen quiero desearles un feliz día a todos los papás en su día; como muestra de que la unidad de nuestros pueblos en ideología y objetivos es lo más importante y sí es posible.






