PRESENTACION
No basta predicar la Revolución, hay que organizarla, es una enseñanza del Partido del Proletariado y de sus Jefes; y para ello debemos estar premunidos de un amplio conocimiento de los hechos y contar con las herramientas teóricas indispensables que nos permitan distinguir a revolucionarios de los aliados, el cómo relacionarnos con ellos y el cómo nos fundimos en las amplias masas pues la característica más profunda y permanente, la condición misma del triunfo, es la organización de las masas populares obreras y campesinas sobre todo: la organización de la Revolución.
Como parte de las actividades de la Coordinadora por los Derechos Humanos y de los pueblos-Base Perú, presentamos el tercer número de este folleto, tocando ahora lo que fue un evento internacional de organizaciones antiimperialistas donde Mariátegui, el fundador del Partido del Proletariado, lo evalúa y señala un aspecto que descalifico pasado ya 3 años, al evento realizado en 1927 sobre las pretensiones de emular al Kuo Ming Tang chino en América Latina, así como el contenido, formas y organización de la lucha antiimperialista.
Lima, Junio 30 del 2024.
EL SEGUNDO CONGRESO MUNDIAL DE LA
LIGA CONTRA EL IMPERIALISMO [1]
José Carlos Mariátegui
En Bruselas se reunió hace tres años, el Primer Congreso Anti-Imperialista Mundial.
Las principales fuerzas anti-imperialistas estuvieron representadas en esa asamblea, que saludó con esperanza las banderas del Kuo Ming Tang, en lucha contra la feudalidad china, aliada de los imperialismos que oprimen a su patria.
De entonces a hoy, la Liga contra el imperialismo y por la independencia Nacional ha crecido en fuerza y ha ganado en experiencia y organización.
Pero la esperanza en el Kuo Ming Tang se ha desvanecido completamente.
El gobierno nacionalista de Nanking no es hoy sino un instrumento del imperialismo.
Los representantes más genuinos e ilustres del antiguo Kuo Ming Tang -la viuda de Sun Yat Sen y el ex-canciller Eugenio Chen-, están en el destierro. Ellos han representado, en el Segundo Congreso Anti-Imperialista Mundial, celebrado en Francfort hace cinco semanas, a la China revolucionaria.
Las agencias cablegráficas norte-americanas, tan pródigas en detalles de cualquier peripecia de Lindbergh, tan atentas al más leve romadizo de Clemenceau, no han trasmitido casi absolutamente nada del desarrollo de este congreso.
El anti-imperialismo no puede aspirar a los favores del cable.
El Segundo Congreso Antiimperialista Mundial, ha sido sin embargo un acontecimiento seguido con interés y ansiedad por las masas de los cinco continentes.
Mr. Kellogg estaría dispuesto a calificarlo en un discurso como una maquinación de Moscú. Su sucesor, si se ofrece, no se abstendrá de usar el mismo lenguaje.
Pero quien pase los ojos por el elenco de las organizaciones y personalidades internacionales que han asistido a este Congreso, se dará cuenta de que ninguna afirmación sería tan falsa y arbitraria, como ésta.
Entre los ponentes del Congreso, han figurado James Maxton, presidente del Independant Labour Party, y A. G. Cook, secretario general de la Federación de mineros ingleses, a quien no han ahorrado ataques los portavoces de la Tercera Internacional.
Todos los grandes movimientos anti-imperialistas de masas, han estado representados en el Congreso de Francfort.
El Congreso Nacional Pan-hindú, la Confederación Sindical Pan-hindú, el Partido Obrero y Campesino Pan-hindú, el Partido Socialista Persa, el Congreso Nacional Africano, la Confederación Sindical Sud-africana, el Sindicato de trabajadores de los Estados Unidos, la Liga Anti-Imperialista de las Américas, la Liga Nacional Campesina y todas las principales federaciones obreras de México, la Confederación de Sindicatos Rusos y otras grandes organizaciones, dan autoridad incontestable a los acuerdos del Congreso.
Entre las personalidades adherentes, hay que citar, además de Maxton y Cook, de la viuda de Sun Yat Sen y de Eugenio Chen, a Henri Barbusse y León Vernochet, a Saklatvala y Roger Badwin, a Diego Rivera y Sen Katayama, al profesor Alfonso Goldschmidt y la doctora Helena Stoecker, a Ernest Toller y Alfonso Paquet.
Empiezan a llegar, por correo, las informaciones sobre los trabajos de esta gran asamblea mundial, destinada a ejercer decisiva influencia en el proceso de la lucha de emancipación de los pueblos coloniales, de las minorías oprimidas y en general de los países explotados por el imperialismo.
Ninguna gran organización anti-imperialista ha estado ausente de esta conferencia.
NOTA:
1 Publicado en «Mundial», Lima, 13 de setiembre de 1929, en la sección «Lo que el cable no dice».





